— Lo acusan de terrorismo, lesiones y robo
— Se trata del grupo liderado por Gonzalo Molina
Jesús Dorantes
La FGE cumplimentó una orden de aprehensión contra Misael “N”, acusado de participar en la retención de policías municipales.
La Fiscalía General del Estado (FGE) de Guerrero informó la detención de Misael “N”, presunto exintegrante de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC), por su probable participación en los delitos de lesiones, privación de la libertad, robo y terrorismo, derivados de los hechos violentos registrados en Tixtla en 2013.
La aprehensión fue realizada en el mismo municipio por elementos de la Policía Investigadora Ministerial, en coordinación con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Guardia Nacional, Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana y la Secretaría de Seguridad Pública Estatal.
De acuerdo con la carpeta de investigación, el detenido habría participado en la retención de seis agentes de la Policía Municipal —identificados como Rubén “N”, Raúl “N”, Gabriel “N”, Martín “N”, Rocendo “N” y Bonifacio “N”— durante la toma del Palacio Municipal de Tixtla, ocurrida en medio de un conflicto entre autoridades y miembros de la CRAC.
La FGE detalló que también se le vincula con los daños e incendio de las instalaciones del Ayuntamiento, acciones que formaron parte de una jornada de protesta en la que los comunitarios exigían la liberación de más de 20 de sus compañeros detenidos por fuerzas federales.
El detenido fue puesto a disposición del juez correspondiente, quien determinará su situación jurídica conforme a derecho.
Un conflicto que marcó a Tixtla
Los hechos por los que se acusa a Misael “N” se enmarcan en una etapa de fuerte tensión entre la CRAC y las autoridades estatales. En abril de 2013, integrantes de la Policía Comunitaria de Acatempa, pertenecientes al sistema de justicia comunitaria, detuvieron a cuatro policías municipales, entre ellos una mujer, como parte de sus acciones de vigilancia.
Meses después, a finales de agosto del mismo año, la situación escaló cuando comunitarios de la CRAC tomaron por la fuerza el Palacio Municipal de Tixtla. Durante el operativo, se produjo un enfrentamiento con policías municipales, quienes fueron desarmados y retenidos por varias horas.
La toma del ayuntamiento —que duró entre tres y cuatro horas— concluyó tras la liberación de los agentes retenidos y la retirada de los comunitarios, pero dejó severos daños materiales y un antecedente de violencia institucional que marcó a la región.
Con esta detención, la Fiscalía busca reabrir un capítulo pendiente de justicia en uno de los episodios más controvertidos de la relación entre el sistema comunitario y el Estado en Guerrero.