— Denuncia estrategia impulsada por voces clandestinas, medios cuestionados y personajes oscuros, con investiduras públicas
— Sostiene que “con perversidad” se difunden calumnias y señalamientos sin fundamento en su contra
— ¡No estás sola! Le manifiestan los trabajadores congregados en la explanada de palacio
Rogelio Agustín
¡No estás sola! Gritaron cientos de trabajadores a la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, luego de que denunciara la existencia de voces que desde la clandestinidad, ocultos en investiduras, algunas con pasados políticos marcados por la corrupción y a través de medios cuestionables, intentan descarrilar a la administración que encabeza en Guerrero, aprovechando su condición de mujer y de madre de familia.
En la explanada de palacio de Gobierno, en la parte sur de la ciudad, la titular del Ejecutivo local salió al paso para responder a la embestida mediática que señala, se intensificó desde la semana pasada.
“Este no es el gobierno de Evelyn Salgado”, dijo en un primer momento, para hacer referencia al hecho de que la administración actual, se integra por miles de mujeres y hombres que se encuentran comprometidos con la transformación verdadera, con la convicción firme de mejorar la vida de las y los guerrerenses.
De acuerdo con la valoración que tiene, indicó que la administración camina por la ruta correcta, aunque advirtió que hay grupos que no se encuentran conformes con el avance.
Indicó: “Como la primera mujer en gobernar este estado, hago frente a diferentes voces; algunas desde la obscuridad y sin sustento, que con perversión, con calumnias y con ofensas buscan engañar a un pueblo informado, se trata de voces que desde la clandestinidad intentan desvirtuar nuestros esfuerzos, con especial nostalgia por los privilegios ostentados en el pasado”.
La resistencia que se presenta, manifestó que va enfocada a frenar los trabajos que se realizan en materia de combate a la impunidad y la corrupción, en todas las dependencias estatales.
También se refirió a los embates que constituyen violencia política en razón de género, de la que fue acusado el obispo emérito de Chilpancingo, Salvador Rangel Mendoza por mujeres que simpatizan o militan en MORENA.
“Soy orgullosamente mujer y madre de familia, eso para muchos es motivo suficiente para violentar y descalificar, a pesar del enorme avance del feminismo en nuestro país, existen aún posturas que censuran y que vulneran a las mujeres por nuestra condición, lo hacen desde todos los espacios y en cualquier ocasión”.
Vino la denuncia: “Hemos visto en las ultimas semanas intentos por descarrilar los avances de la transformación en Guerrero, pero desde aquí les decimos que no lo van a lograr, vamos a seguir trabajando desde que lo hicimos desde el primer minuto; sin descanso”.
Luego, sostuvo que “ni medios cuestionables, ni personajes oscuros cobijados en investiduras, ni figuras políticas con pasados plagados de corrupción van a detener el avance de la cuarta transformación”.
Se asumió como una mujer mujer decidida y comprometida, que tampoco cederá terremo ante los embates.
“Vamos a lograr recuperar la confianza perdida por los gobiernos del pasado, porque no somos iguales y eso lo hemos demostrado”, enfatizó.
Reiteró que no tiene derecho a fallar a la expectativa que la sociedad tiene depositada en ella y el proyecto que representa la Cuarta Transformación, por lo que manifestó que sus convicciones y valores no han variado.
“No olvidamos de donde venimos, en donde estamos ni hacia donde vamos; no olvidamos las luchas que representamos, nací en la izquierda, crecí en la izquierda y moriré en la izquierda, porque rendirse no es una opción”.
Manifestó su respaldo al gabinete que la acompaña y los conminó a redoblar esfuerzos.
Cuando el mensaje terminó, cientos de trabajadores que se encontraban en la explanada de Recinto Oficial del Poder Ejecutivo local le manifestaron su respaldo con el grito de “No estás sola”.