— En una publicación escueta, Norma Otilia Hernández Martínez expresa su consternación por la escalada de violencia
— Manifestaciones de apoyo generan polémica en redes sociales
— La Mesa de Coordinación para la Construcción de la Paz implementa operativo de seguridad especial
Rogelio Agustín
La alcaldesa Norma Otilia Hernández Martínez sostuvo que los hechos de violencia registrados el sábado 8 de julio, generan consternación y “obligan a las autoridades a replantear las estrategias de seguridad”.
Cuando se confirmaban los ataques que dejaban un saldo de tres muertos, cuatro heridos y por lo menos cinco vehículos calcinados la jefa de cabildo colocó en sus redes sociales una publicación que generó polémica entre los usuarios.
“Nuestro llamado siempre será a construir un estado y un municipio de paz, los lamentables hechos de los últimos días y horas, nos consternan y nos obligan como autoridades a replantear las estrategias de seguridad”, señaló la presidenta municipal.
La publicación, se utilizó también para frenar un rumor que comenzaba a cobrar fuerza, que apuntaba hacia la separación de Hernández Martínez de la presidencia municipal.
“Reitero que estoy en comunicación con las autoridades federales y estatales, así como el sector transporte público para brindarles todo el apoyo y el acompañamiento a las familias afectadas”, plantea.
Luego cierra: “Norma Otilia Hernández Martínez, presidenta municipal de Chilpancingo”.
Esa publicación de apenas dos párrafos ha generado una fuerte discusión entre usuarios de las redes sociales, hay un sector que respalda a la alcaldesa, mientras otros le exigen la separación del cargo.
Mesa Central confirma operativos de vigilancia
Por la noche del sábado, la Mesa de Coordinación para la Construcción de la Paz informó que se implementaría un operativo de seguridad en el que participan Estado y Federación, con la intención de evitar más hechos de violencia.
Se dio a conocer que personal del Ejército Mexicano, la Guardia Nacional (GN), de la Marina Armada y la Policía del Estado realizarían recorridos, además de que implementarían filtros de seguridad en puntos estratégicos de la ciudad, para permitir que los ciudadanos mantengan sus actividades rutinarias sin complicaciones.
Se menciona la vigilancia especial en el corredor Chilpancingo-Chilapa y el tramo que va hacia Petaquillas, con la intención de reinstalar la tranquilidad entre la población.