— “Son tres o cuatro que se la pasan en el SNRP”, dice con ironía el candidato único
— “Quieren la UAGro como instrumento de venganza, para hacerle paros a la gobernadora”, acusa
— Aún así, dice que los buscará para dialogar
Rogelio Agustín
Cuatro horas antes de que cerrara la jornada electoral en las unidades académicas y centros de trabajo de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAGro), el candidato único, Javier Saldaña Almazán dio por hecho que el próximo 27 de septiembre tomará protesta ante el Consejo Universitario (CU), para instalar el que será su tercer mandato de cuatro años, con el ofrecimiento de que buscará a los “tres o cuatro que representan a la oposición”.
En un encuentro con los medios de comunicación realizado en un hotel del lado sur de la ciudad, Saldaña Almazán confió en que al momento en que cerraran las 112 casillas instaladas en planteles de las siete regiones del estado, la participación sería de por lo menos el 85 por ciento de los universitarios.
Mannifestó que su compromiso central, es consolidar a la institución, superando los rezagos que se acentuaron por la pandemia del Covid-19, misma que aseveró: “nos pegó muy fuerte”.
Anticipó que para el año escolar próximo, considera que no habrá examen del Centro Nacional de Evaluación (Ceneval) en las preparatorias ni en las licenciaturas del área social.
Más aún, dijo que para las carreras del área de la Salud, pretende impulsar un modelo que permita absorber toda la demanda que se tiene, “para que nadie se quede fuera”.
La elección es buena
Cuestionado sobre la legitimidad de la elección, principalmente por el hecho de que solo hubo un candidato a la rectoría, Saldaña sostuvo: “Tan es legitimo (el proceso), que incluso alguno de los críticos acaba de votar por mi en (la facultad de) Derecho”.
Sostuvo que entre las voces que cuestionan el proceso, “hay quienes quieren el control de la UAGro para hacerle huelgas y paros laborales a la gobernadora”.
Se refirió a sus opositores como “tres o cuatro” personas, entre ellos un ex rector que derivado del conflicto que generó su elección, tuvo que asumir el control de la administración central “a balazos”.
“Quieren tomar la institución como instrumento de venganza”, aseveró.
Recordó que sus opositores, entre ellos el ex rector Ramón Reyes Carreto y el ex secretario general, Román Ibarra Flores, estuvieron en la mesa de trabajo en que se diseñaron las reglas del juego para el proceso electoral que está en curso.
Negó que tenga cooptado al Consejo Universitario, máximo órgano de gobierno en la institución, como prueba de ello, es que señaló que suele no acudir a las sesiones para evitar que se diga que ejerce algún tipo de presión.
A pregunta expresa, dijo que confía en que la participación de la comunidad universitaria sea de por lo menos un 85 por ciento, del padrón electoral integrado por 74 mil estudiantes y 6 mil trabajadores, tanto docentes como administrativos y de intendencia.
Buscará a los “tres o cuatro” opositores
Durante la conferencia de prensa, Javier Saldaña Almazán manifestó que respeta a quienes asumen una posición contraria a lo que considera como su inminente tercer rectorado.
Sin embargo, en varias ocasiones sostuvo que solamente son “tres o cuatro” y que sus posturas se difunden a través de conferencias en el Sindicato Nacional de Redactores de la Prensa (SNRP), pero no en las unidades académicas de la casa de estudios.
Dijo que se trata de un grupo de personas que se desenvuelven en un esquema desfasado, cuando los cargos se distribuían como cuota de las corrientes internas, ante lo que volvió a referirse con ironía: “aunque había organizaciones bochito, integradas por tres, cuatro y hasta cinco personas”.
Anticipó que su administración será plural, en la que se incorporarán prácticamente todos los equipos de trabajo, pero particularmente dijo que cuidará que se respete el principio de paridad, para empoderar a las mujeres universitarias.
En el cierre de la conferencia anticipó: “Voy a buscar a los compañeros que se la pasan en el SNRP, voy a platicar con ellos y aclaro que no hay pleito con nadie, yo no soy de conflictos y para que eso exista se necesitan dos partes, yo no he tomado ese camino”.
Precisó que buscará el acercamiento con sus opositores después del 5 de junio, cuando el Consejo Universitario califique el proceso electoral.
Dio por hecho que el próximo 27 de septiembre, tal y como lo establece la norma, tomará protesta como rector, lo que representará el inicio de su tercer mandato al frente de la administración central universitaria.