— La familia permaneció 11 días plantada en la terminal de autobuses
— También la mamá y el hermanito de Iker David, de siete años sufrieron afectaciones
Héctor Camacho
Luego de que la empresa Estrella de Oro aceptara cubrir los gastos médicos y el tratamiento psicológico del niño de siete años de edad, Iker David, quien perdió un brazo en el accidente registrado el pasado 23 de octubre, los familiares liberaron la terminal de autobuses ubicada en el lado norte de la capital del estado.
El acuerdo se alcanzó 13 días después del accidente y 11 de que la familia del pequeño, así como de otros afectados por la volcadura registrada en la Autopista del Sol instalaran un plantón en las instalaciones de dicha empresa.
En el accidente murió una menor de 17 años y otro niño de 11, además de que hubo más de 20 lesionados, pero no todos estuvieron en la protesta.
Iker viajaba junto con su mamá y su hermanito, sufrió la pérdida de su brazo izquierdo y la empresa de primera instancia había ofrecido el pago de 70 mil pesos, lo que la familia consideró como una burla.
Para llegar al acuerdo del viernes se tuvieron que desahogar nueve mesas de trabajo, en las que el Gobierno de Guerrero fungió como mediador.
La familia no hizo muchos comentarios respecto a los acuerdos alcanzados, se limitaron a señalar que la empresa absorberá los gastos médicos, las curaciones y el tratamiento psicológico para Iker, su mamá y su hermanito.
Nicolás Chávez Adame, asesor de la Secretaría General de Gobierno, manifestó que se buscó llegar a los acuerdos que favorecieran a los afectados, puntualizando que la administración estatal fue un mediador entre las partes.
Los familiares del pequeño Iker dieron las gracias a la población de Chilpancingo, por la solidaridad que mostraron durante los días en que se mantuvieron en el plantón.
Luego levantaron el campamento, dieron por terminada la lucha y las operaciones de Estrella de Oro se reactivaron.
