— Las familias conocen la ubicación, solo quieren el apoyo institucional
Jesús Dorantes
Chilpancingo, Gro.- Integrantes del Colectivo de Esposas e Hijos de Desaparecidos de la Guerra Sucia en Atoyac de Álvarez, exigieron que sean exhumados ocho cuerpos localizado en una fosa clandestina encontrada en la Costa Grande de Guerrero.
En una rueda de prensa ofrecida en Chilpancingo, Gloria Rojas Terán, hija de Francisco Rojas Nazario, quien fue asesinado junto con su hijo Pablo Rojas Terán el 20 de diciembre de 1967, exigió que se exhumen los cuerpos que se saben se encuentran en Los Espadines, punto ubicado en el municipio de Ajuchitlán del Progreso.
La hija de Francisco Rojas recordó que tras ser asesinados sus familiares, a las mujeres de la comunidad los obligaron a enterrarlos, por lo que tenían conocimiento del lugar dónde quedaron sus seres queridos.
El representante del colectivo, Octaviano Gervacio Serrano, confirmó que la Comisión Estatal y Federal de Búsqueda de Personas, ya hicieron una revisión en el lugar el pasado 16 de junio pero no continuaron con el proceso para exhumar los cuerpos.
La excusa que se expuso, fue que ya se aproximaba la temporada de lluvias y posteriormente la de siembra, por lo que esperarían a que ambas terminen para poder iniciar los trabajos de exhumación.
Gervacio Serrano calificó la respuesta de las autoridades como una clara negativa a buscar a sus familiares, además de asegurar que hay 300 militares con vida que participaron en la llamada Guerra Sucia, mismos que siguen sin castigo.
Asegura deben ser citados por las autoridades y responder por los crímenes cometidos, ya que en la actualidad, son protegidos por el gobierno.