Piden hoteleros que las reformas para el combate de extorsión sí se apliquen

— Que no queden en papel solamente sugirió la lideresa de hoteleros, Yamilet Payán

Rosario García Orozco

La reciente aprobación de la Ley Antiextorsión por parte del Congreso de Guerrero fue bien recibida por el sector empresaria de Chilpancingo; sin embargo, su efectividad dependerá de que realmente se aplique, advirtió Yamilet Payán, presidenta de la Asociación de Hoteles y Moteles de la capital.

La dirigente empresarial señaló que, aunque es positivo que los legisladores impulsen normas para proteger a la ciudadanía, estas carecen de utilidad si no se traducen en acciones concretas. “Está bien que haya leyes, pero ahora el detalle es que la ciudadanía agarre valor y vaya a denunciar”.

Sostuvo que el temor generalizado entre víctimas de extorsión inhibe las denuncias, por lo que también considero que se deben generar las condiciones de confianza hacia las autoridades.

Afirmó que comerciantes y prestadores de servicios continúan siendo blanco frecuente de ese delito, lo que mantiene a la población “con el Jesús en la boca”. Indicó que diariamente reciben llamadas de extorsión, por lo que urgió a las autoridades a aplicar la nueva ley y mostrar resultados.

“Sería importante que realmente ejecuten y digan: ‘a esta persona la detuvimos por extorsión y tendrá tantos años de cárcel’, para ver si así se calma el problema”, expresó.

Yamilet Payán también cuestionó las fallas legales que, a su juicio, favorecen a los delincuentes y obstaculizan la impartición de justicia. “Tiene más garantías el delincuente que el ciudadano común, porque hay lagunas legales y tratados internacionales que los protegen más”.

Enfatizó además que la falta de aplicación de las leyes ha debilitado la confianza en las instituciones, especialmente en temas de violencia contra las mujeres. Recordó que su propio caso de violencia laboral tardó cuatro años en resolverse. “Fue porque me aferré; de otra manera, no habría avanzado”, lamentó.

Del mismo modo insistió en que la aprobación de leyes no basta si no se abren precedentes y se fortalecen las acciones para garantizar su cumplimiento. “De nada sirve que

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