— Durante diligencia relacionada con el caso Ayotzinapa
Rogelio Agustín
La periodista Natividad Ambrosio denunció el acto de hostigamiento y de obstrucción de su labor realizado por un agente de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSyPC) durante la cobertura de una diligencia relacionada con la desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa, en la ciudad de Iguala de la Independencia.
En su cuenta personal de Facebook, la periodista denunció que la jornada del martes 9 de diciembre, cuando acudió a las instalaciones del Servicio Médico Forense (SEMEFO) para cubrir la información relacionada con la diligencia de la Unidad Especializada en Investigación y Litigación para el Caso Ayotzinapa, un agente de la SSyPC se acercó a ella para hostigarla, tomándole fotografías a ella, otra reportera de la que no proporcionó el nombre y también para tomar imágenes de su vehiculo.
La comunicadora manifestó en su red social que la conducta del agente tuvo como objetivo impedir que realizara su trabajo, lo que también implica limitar el derecho a la información de la sociedad, porque se trata del seguimiento de un caso que a pesar del paso de los años, mantiene un alto interés en el estado y en el país.
En las últimas semanas, agentes de la UEILCA han realizado varios cateos y detenciones en Iguala, al parecer relacionados con la desaparición de los estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos, siempre resguardados por elementos del Ejército Mexicano, de la Guardia Nacional y la SSyPC.
Ante la acción de amedrentamiento, Natividad Ambrosio demandó al Gobierno de la República que garanticen el ejercicio de la labor periodística, de tal manera que cesen los actos de hostigamiento a quienes cumplen con su trabajo de informar a la población.
Indicó: “Hago responsables a los agentes de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana de cualquier situación que atente contra mi integridad o seguridad personal”.
Natividad Ambrosio es de las reporteras que dieron cobertura a los ataques que los normalistas rurales sufrieron la noche del 26 de septiembre de 2014, también de los comunicadores que se han mantenido en el seguimiento permanente del caso, trabajando para diferentes medios de Iguala y del estado de Guerrero.