— Sergio Montes Carrillo hace relatoría de agravios, pero también reprocha el trató que su partido le dio al puerto de Acapulco, tras la devastación del huracán “Otis”
Rogelio Agustín
El ex consejero estatal de MORENA, Sergio Montes Carrillo dio a conocer su renuncia a 10 años de militancia en dicho instituto político, bajo el argumento de que ya perdió su esencia y está “podrido” en la antidemocracia, pero también por el trato que dicho partido le ha dado al puerto de Acapulco, tras la devastación provocada por el huracán “Otis”.
La renuncia de Montes Carrillo para algunos actores internos de MORENA estaba cantada desde hace varios meses, por sus posturas críticas al interior y su abierta simpatía con el ex canciller Marcelo Ebrard Casaubón.
Este jueves 9 de noviembre, al dar a conocer que deja atrás su militancia en MORENA, el ex representante ante el Instituto Electoral local aseguró que dicho partido carece de una dirigencia estatal legalmente sustentada.
Señala que se afilió a MORENA el 20 de octubre de 2013, siendo este el único partido en el que ha militado de manera formal.
En un documento dirigido al presidente del Comité Ejecutivo Nacional (CEN), Mario Delgado Carrillo, Sergio Montes le señala que nunca estuvo de acuerdo con la forma en que se posicionó como dirigente nacional en 2020.
También señala que el proceso electoral 2020-2021, cuando se renovó el Congreso local, 81 alcaldías y la gubernatura de Guerrero terminó en la imposición de candidatos, además, cita la elección de consejerías internas en 2022, en la que sostuvo que afloraron “los vicios del viejo régimen”.
También sostiene que el proceso para elegir candidato presidencial de MORENA resultó ser “una farsa”.
Enseguida señala que el principal líder fundador de MORENA declaró su jubilación en septiembre pasado, de tal suerte que los liderazgos no se heredan y “los bastones de mando no se aplican en la realidad”.
De hecho, señala que la figura del bastón de mando no está en ninguno de los documentos básicos de MORENA.
Por hechos como los antes mencionado, manifestó que no está en la disposición de esperar a que haya más agravio, pues muchas de las cosas que se están registrando constituyen “una farsa antidemocrática que conduce al gatopardismo”.
Y sentencia: “Los ex perredistas y ex priistas que llegaron al abordaje, al agandalle y al pirataje a MORENA pronto tendrán cada uno de ellos en sus haberes dos partidos políticos fracasados”.
Incluso, entre los argumentos para renunciar cita las secuelas del huracán Otis, por el trato que se le ha dado al puerto de Acapulco.
“Como Acapulqueño no puedo aceptar el desdén y la falta de compromiso de la clase política de MORENA, los mejorales y los curitas no ayudan contra la devastación”.