— Abandonada en un camino de terracería junto a canales de Barajillas
— Cierran negocios por ataque armado
Javier Trujillo
Acapulco, Gro.- Los cuerpos de dos personas calcinadas fueron encontrados dentro de una camioneta, en una brecha que lleva al rancho de «Los Marín», en la comunidad de Barajillas, municipio de Cuajinicuilapa, región de la Costa Chica de Guerrero.
Antes una balacera en pleno centro de este municipio costachiquense, motivo el cierre del comercio ante la posibilidad de perder nuevos ataques y que vayan a perder la vida.
Del primer caso se informó que los hechos se registraron aproximadamente a las 13:00 horas, al encontrar los dos cuerpos, de dos personas, al parecer una mujer y de un hombre ambos totalmente calcinados al interior de una camioneta, marca Nissan, tipo estaquitas, color roja.
Los primeros informes policiales y de seguridad pública, revelaron que el sujeto calcinado, podría ser Jair Cipriano Montaño Roque, de 23 años quien laboraba en el rancho de «Los Marín», mientras que la otra persona podría tratarse de una fémina la cual se encuentra en calidad de desconocida.
De acuerdo con algunos testigos dijeron que podría tratarse de una ejecución y que posteriormente le hayan prendido fuego a la unidad con los cuerpos en el interior del vehículo.
Cabe mencionar que en la escena del crimen, acudieron efectivos de la Policía Estatal y Guardia Nacional, los cuales acordonaron la zona y escena del crimen con cinta amarilla para resguardar el área en espera del personal de la Fiscalía Regional de la Costa Chica.
Antes de las 13 horas de lunes, sujetos armados irrumpieron con violencia en un local de venta de quesos y dispararon en contra una comerciante que recibió disparos de arma de grueso calibre y quedó herida.
En pleno centro de Cuajinicuilapa, sujetos armados ingresaron al negocio para atacar a la propietaria frente a sus empleados y clientes.
La mujer, víctima del ataque armado, fue identificada como Ana Cano y tras haber sido baleada, herida fue trasladada a bordo de una camioneta para brindarle atención médica.
Tras la agresión los pistoleros huyeron, mientras que sus familiares auxiliaron a la mujer, y la trasladaron al hospital a bordo de una camioneta para que recibiera atención médica.
Después de los ataques, los comerciantes del centro de Cuajinicuilapa optaron por cerrar sus negocios ante el miedo a ser víctimas de un ataque.