— Por el crimen, pero también por el Ejército y las policías, asegura
— Desde que surgió en enero de 2013 se ha tratado de desmantelar al SS y JC
Jesús Dorantes
El dirigente de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), Bruno Placido Valerio reconoció que dicha organización se encuentra infiltrada por la delincuencia organizada desde que surgió como movimiento de autodefensa, en enero de 2013.
En Chilpancingo, el principal dirigente del Sistema de Seguridad y Justicia Ciudadano (SS y JC), que opera en la Costa Chica, región Centro y parte de Acapulco se presentó ante diferentes medios de comunicación para hablar sobre el señalamiento hecho por la Fiscalía General del Estado (FGE), en el sentido de que la jornada del miércoles, integrantes de la delincuencia organizada se movilizaron en Acapulco para tratar de forzar la liberación de personas vinculadas al crimen.
“Desde el principio nos han atacado, nos han dicho que estamos infiltrados por la delincuencia organizada, eso no es algo nuevo y no hay que espantarse”, aseguró quien fuera fundador de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC).
Indicó que desde que la UPOEG surgió para defender a las comunidades, primero en la Costa Chica y después hacia otras regiones del estado, hubo el interés de la delincuencia, así como de las autoridades del Estado y la Federación por controlarlos.
Por esa razón, dijo que llegó a “inflarse” al ex coordinador de la CRAC, Eliseo Villar Castillo, actualmente preso en Chilpancingo para tratar de desarticular a los grupos del SS y JC, que rápidamente crecieron hacia la zona Centro, parte de la Montaña y el puerto de Acapulco.
Sin embargo, aclaró que la dirigencia de la UPOEG nunca ha organizado a la gente para enfrentarse a la Marina Armada, la Secretaría de la Defensa o las policías locales, como se ha señalado en los últimos días.
Si bien reconoce que existe un problema, Placido Valerio sostiene: “No toda la UPOEG está infiltrada”.
A manera de comparación señaló: “Nosotros hemos detectado a personal de la Fiscalía General de la República (FGR) cometiendo actos de extorsión y los hemos entregado a sus mandos, no hemos dicho que todos están coludidos”.
Continúa: “También hemos detenido a policías estatales con droga y se los hemos dado con respeto, incluso, a policías ministeriales les hemos encontrado combustible robado y tampoco les hemos puesto en evidencia, se los entregamos a las instituciones”.
En su caso personal, dijo que es un dirigente con una estrecha vigilancia y monitoreo, sin que hasta el momento se haya detectado algo que lo vincule directamente con la delincuencia.
Pero reiteró: “Yo lo reconozco, estamos infiltrados desde que comenzó el proyecto, se nos han infiltrado delincuentes y militares, pero hemos resistido”.
Insistió en que lo vivido el martes en Marquelia no fue un enfrentamiento, si no una agresión muy dirigida de las fuerzas federales contra los miembros de la policía ciudadana.
Respecto a la detención de un presunto integrante del crimen organizado el miércoles en Acapulco, dijo que se trata de una pieza menor, “pues la verdad es que no están yendo a detener a los cabecillas”.
Hizo un llamado para que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) intervenga en este caso y no avance lo que parece una embestida encaminada a desmantelar a la Unión de Pueblos.