– La reconstrucción está a cargo del Gobierno del Estado, informa Alfredo Sánchez Esquivel
– “Comienzan a surgir situaciones muy delicadas”, insiste el también líder parlamentario de Morena
Rogelio Agustín
El presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Congreso local, Alfredo Sánchez Esquivel confirmó que la reconstrucción de la biblioteca Siervo de la Nación se encuentra a cargo del Gobierno del Estado, además, dijo que al demoler la estructura se encontraron “vicios ocultos” que datan desde su construcción, durante el interinato de Ángel Aguirre Rivero.
Sánchez Esquivel manifestó que se encuentra a gusto con el planteamiento hecho por el Comité de Administración que preside el diputado local del PRD, Carlos Reyes Torres, en el sentido de que a la brevedad posible, presente un informe respecto al monto y las condiciones que propiciaron la demolición de la biblioteca de referencia.
Dijo que resulta positivo tener qué informar, si se tiene en cuenta que durante más de diez años, el Congreso no registró ningún trabajo que fuera encaminado al mejoramiento de su infraestructura.
“Ya tenemos un pequeño informe pormenorizado, que le vamos a proporcionar a la comisión de administración”, anticipó.
De primera instancia, dijo que la construcción del pozo artesiano se encuentra sumamente justificada, sí se tiene en cuenta que en Chilpancingo se carece de agua casi de manera permanente.
“Somos un Poder público que brinda un servicio a cientos de personas que todos los días van al Congreso, a los propios trabajadores y debemos contar con un suministro garantizado”, indicó el representante popular.
Respecto a la biblioteca, destacó que hay algunos asuntos que se vienen trabajando desde la Legislatura anterior, de la que él y algunos diputados más formaron parte.
“En 2020 se comenzó a platicar sobre el tema, en 2021 se pusieron en marcha los trabajos para restructurar la biblioteca y dejarla en condiciones, algunos desconocían los acuerdos pero otros no”, destacó.
Indicó que el Congreso necesita de un espacio para poder generar reuniones, ya que las salas actuales se encuentran casi siempre saturadas.
Respecto a los dictámenes que justifiquen la demolición y posterior reconstrucción, dijo que se cuenta con todos los estudios de ingeniería que permitieron tomar las determinaciones que se asumieron.
Destacó: “Ahora comienzan a surgir algunas cuestiones muy delicadas en el tema de su estructura, que refuerzan que no había condiciones para que la biblioteca Siervo de la Nación continuara como estaba”.
Recordó que esa parte del Congreso, durante muchos años ha sido objeto del embate de grupos radicales, se le ha sometido a fuego y también ha resistido movimientos de tierra.
Ahora que se ha realizado la demolición, dijo que “empiezan a aparecer temas de vicios ocultos de cuando fue construido”.
El edificio del Congreso fue inaugurado en 1998, durante el interinato del ex gobernador Ángel Aguirre Rivero.
A pregunta expresa, Sánchez Esquivel dijo que la obra está a cargo del Gobierno del Estado a través de la Secretaría de Obras Públicas, ya que el Congreso solo es el usuario de dicha acción institucional.