Vigilancia extrema en el paseo del Pendón, en Chilpancingo

 Militares, policías y cuerpos de auxilio, también se utilizaron helicópteros

La edición 192 del tradicional Paseo del Pendón -con el que inicia la tradicional feria de San Mateo, Navidad y Año Nuevo-, es hasta el momento la más vigilada en su historia, pues para garantizar la seguridad de más de 50 mil personas que se agolparon en la calles de Chilpancingo se desplegaron brigadistas de Protección Civil, bomberos, la Policía Municipal, policías del estado y por primera vez, personal del Ejército Mexicano en labores de vigilancia.

Como se tenía previsto, el recorrido por calles de los cinco barrios tradicionales; San Mateo, Santa Cruz, San Francisco, San Antonio y Tequicorral comenzó poco después de las 11:00 horas del domingo 19 de diciembre.

Como sucede desde hace casi dos siglos, el recorrido comenzó en la calle Miguel Hidalgo, a poca distancia de la plaza de San Mateo, a la cabeza se colocó el contingente que encabezaron el gobernador Héctor Astudillo Flores, su esposa Mercedes Calvo y el alcalde capitalino Jesús Tejeda Vargas.

Junto al jefe del ejecutivo local caminaron los diputados Maluisa Vargas Mejía y Víctor Manuel Martínez Toledo, más atrás el carro alegórico de la señorita Flor de Noche Buena y poco a poco fueron avanzando las danzas, principalmente grupos de tlacololeros, danzantes de prehispánico, manueles, santiagos y chinelos, entre otros.

De acuerdo con Marco Cesar Mayares, hubo 150 brigadistas de Protección Civil vigilando el trayecto del paseo, más 50 que se distribuyeron en las instalaciones de la feria de Navidad y Año Nuevo.

El funcionario agregó que el municipio aportó por lo menos 80 elementos de la Policía Preventiva Municipal, los que contaron con el respaldo de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del estado y de soldados de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), que por primera vez en Chilpancingo tomaron parte de la vigilancia de esta festividad, la más importante para los habitantes de la capital de Guerrero.

Los primeros elementos armados se apostaron en la esquina que forman la calle Nicolás Catalán con la avenida Benito Juárez, casi frente al histórico edificio docente.

En Ignacio Ramírez se miró a personal militar con toletes, pero en la calle Cristóbal Colón, antes de llegar la avenida Miguiel Alemán se volvieron a mirar más elementos con armas de cargo.

La policía estatal también llamó la atención, entre otras cosas por la movilidad constante que tuvieron los elementos de motocicleta, tanto en la periferia del recorrido como en la ruta que siguieron los contingentes.

Durante toda la jornada, helicópteros de la Marina Armada y de la SSP sobrevolaron el primer cuadro de la ciudad, lo que captó de manera importante la atención de los participantes en la festividad.