Hay mil 200 operando en la entidad
En coordinación con el gobierno estatal y la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), el titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), Luis Enrique Miranda Nava concluyó la capacitación a 300 voluntarias que trabajan para mil 200 comedores comunitarios, que desde 2013 funcionan en las siete regiones del estado.
En las instalaciones del Sexto Batallón de Ingenieros en el Combate a Desastres Naturales, el titular de Sedesol estuvo acompañado por el gobernador Héctor Astudillo Flores, los alcaldes de Chilpancingo, Marco Antonio Leyva Mena y Jesús Parra García de Chilapa, además de delegados de dependencias federales.
En las instalaciones de la 35 zona militar, se dio por concluida la capacitación a 300 personas que participarán en la reacción inmediata en caso de que se presenten contingencias naturales, cuando se ponga en marcha el plan DN-III-E.
El gobernador Héctor Astudillo Flores recordó que la operación de los comedores comunitarios ha sido fundamental para que la población civil supere momentos de crisis, pues surgieron durante los estragos provocados por los huracanes Ingrid y Manuel.
Si bien los comedores comunitarios están instalados en zonas urbanas, dijo que también funcionan en zonas de muy alta marginación, lo que contribuye a paliar el problema que representa la pobreza extrema.
En su intervención, el secretario Miranda Nava hizo un reconocimiento al personal que colabora con la Sedesol, particularmente con las responsables de los comedores comunitarios
Explicó que de los 3.5 millones de habitantes que tiene la entidad, de los que un millón 800 mil tienen la posibilidad de acudir a los comedores comunitarios, particularmente los que se encuentran en pobreza alimentaria.
Cada año, Sedesol destina 13 mil millones de pesos para la atención a las personas en pobreza alimentaria, parte importante de ellos en Guerrero.
A estas alturas, dijo que hay más de 5 mil 600 comedores comunitarios, los que operan con mujeres voluntarias que son capacitadas por personal del Ejército Mexicano, de ahí la vinculación que haya entre ambas dependencias del gobierno federal.
“Te mato si no lo metes en un comercial”
En su intervención, el titular de Sedesol estableció un dialogo con la voluntaria Ema Prudenciano Peláez, a quien le solicitó que relatara como se trabaja en un comedor comunitario.
Con expresión benevolente, la mujer hizo una relatoría de cómo se vive la rutina en el comedor que está bajo su responsabilidad.
“Nosotros preparamos los alimentos para las personas que son beneficiarias de nuestro comedor, trabajamos de seis de la mañana a seis de la tarde, tenemos 120 beneficiarios y en el desayuno servimos de nueva a once de la mañana, aunque a veces el horario se extiende hasta las dos de la tarde, por lo que ya no cerramos para la hora de la comida”.
La mujer dijo además, que las voluntarias no siempre se van a las seis de la tarde, ya que por lo general deben quedarse una hora más para hacer el aseo.
Agregó: “para nosotros es un orgullo cuando un niño sonríe porque le encantó un alimento, pero también atendemos ancianitos que ya están solitos y no tienen quien los cuide, incluso llegan estudiantes de escasos recursos que con nosotros tienen el alimento que necesitan para llegar con energía a sus escuelas”.
En esa parte, Miranda Nava tomó el micrófono, miró hacia el presídium y le dijo a su responsable de imagen: “Te mato si no metes esto en un comercial”.
Aunque el funcionario externó dicha frase en tono de broma, a parte de la concurrencia le pareció un comentario de mal gusto, por los altos niveles de criminalidad que se registran en la entidad.