Tras la jornada de enfrentamientos del lunes por la noche, los civiles armados que pretendían llegar desde Chilapa hacia Tlaltempanampa, municipio de Zitlala regresaron a sus comunidades de origen, tras conseguir la liberación de dos de sus compañeros.
El lunes por la tarde, en la comunidad de Topiltepec, el ataque a balazos por parte de un par de delincuentes que se desplazaban a bordo de una motocicleta dejó el saldo de dos hombres muertos y un herido.
Después, en Tlaltempanampa se generó un enfrentamiento entre habitantes de la localidad y civiles armados incorporados a Comunitarios por la Paz y la Justicia, que opera en pueblos de Quechultenango, Chilapa y Zitlala.
Al menos 20 camionetas cargadas de hombres armados intentaron llegar, desde los pueblos ubicados en la parte sur de Chilapa hacia Zitlala, sin embargo, fueron interceptados por personal militar y de la Policía del Estado en el paso conocido como “Los Ajos”, sobre la carretera federal Chilpancingo-Tlapa.
El vocero Alvarez Heredia comentó que poco antes de las 07:00 horas, los civiles armados optaron por regresar a sus localidades de origen, lo que permitió culminar con la tensión que su presencia generaba.
Reconoció que la ruta que va de Quechultenango hacia Chilapa y Zitlala es una zona muy complicada, en la que existe una férrea disputa por el control de los territorios utilizados en la siembra y trasiego de las drogas.
“Eso genera un choque de intereses muy fuerte, lo que da pie a la dinámica de desaparecidos, homicidios en la zona y probablemente otros delitos como las extorsiones”, anotó.
En cuanto a los asesinatos reportados en Topiltepec, Alvarez cuidó manejar el asunto como algo diferente de a la tensión vivida en Tlaltempanampa, por lo que indicó que en esa parte ya la Fiscalía General del Estado (FGE) integró una carpeta de investigación, la cual va encaminada a tratar de esclarecer el caso.