Infiltración de “Los Tequileros” genera desconfianza hacia los habitantes de La Gavia

Derechos Humanos confirma el desplazamiento de los habitantes
El presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Guerrero (CDHEG), Ramón Navarrete Magdaleno reconoció  que la infiltración del grupo delictivo “Los Tequileros” genera incertidumbre en las autoridades respecto a los habitantes de La Gavia, pues no saben quienes son ciudadanos de bien y quienes colaboran con Raybel Jacobo de Almonte.
En el centro de la capital del estado, Navarrete Magdaleno reconoció que en los últimos días se incrementó el número de familias que abandonaron la comunidad de La Gavia, en el municipio de San Miguel Totolapan.
De hecho, el desplazamiento de ciudadanos se aceleró tras los hechos suscitados la madrugada del lunes 19 de junio, cuando elementos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), de la Procuraduría General de la República (PGR) fueron recibidos a balazos por integrantes de la banda de Jacobo de Almonte.
En el testimonio de los agentes que sobrevivieron al ataques, por lo menos 60 pobladores salieron a tratar de impedir que la PGR se llevara a tres de los pistoleros que participaron en la emboscada, por lo que utilizaron a mujeres y niños para tratar de entorpecer su trabajo.
Navarrete confirmó que al organismo que representa han llegado muchas solicitudes de resguardo para las familias que han decidido abandonar la comunidad de referencia, por lo que se ha dispuesto de diferentes operativos encaminados a resguardar su traslado.
“Hemos recibido reportes de familias agradeciendo a la CDHEG porque se han visto beneficiadas con el apoyo; la semana pasada estuvimos recibiendo diariamente de dos, tres y hasta cuatro llamadas telefónicas para pedir el respaldo”, anotó.
Aunque muchos de los que pidieron el acompañamiento se volvieron a comunicar para agradecer y dar a conocer que ya están fuera de la comunidad, el ombudsman destacó que no se tiene el dato de cuantos permanecen en La Gavia ni los lugares en los que se refugiaron.
Esos datos, dijo que no los tiene ni quiere tenerlos, porque la secrecía de su nueva ubicación es una garante de que no pondrán en riesgo su integridad personal.
Respecto a la criminalización que enfrentan los habitantes de La Gavia, el presidente de la CDHEG sostiene que en parte es real, pero admite que hay razones de peso para desconfiar de ellos.
“Yo he estado en La Gavia, realmente para establecer un parámetro de quienes estamos hablando en ese momento es muy difícil; no hay manera de establecer que los de una colonia o calle son gente de bien y los demás no, la verdad es que es muy difícil y se comprende la disyuntiva en que están los policías por ejemplo”.
Las dudas respecto a la infiltración de los pobladores, dijo que se incrementan cuando se tienen antecedentes como  los de la madrugada del 19 de junio, pues “según lo que dicen los medios; es que todo el pueblo se les fue sobres”.
Y asume: “Bajo esas circunstancias, pregúntame a mi ¿A quien hay que defender en La Gavia? La verdad es que hay mucha incertidumbre porque no hay una definición de quienes son los que están participando con los tequileros y quienes están coadyuvando, por lo menos en un terreno neutral”.
En el caso de Derechos Humanos, dijo que cuando llega una solicitud de apoyo solamente se toman los datos  y se canaliza la petición al Gobierno del estado, pero no se tiene la certeza de la imparcialidad de quienes piden el acompañamiento.
“Vimos recientemente que uno de los trasladados tenía orden de aprehensión, la verdad es que esto está muy complejo”, anotó  Ramón Navarrete Magdaleno.