— Capama, arrojó hipoclorito de sodio para quitar mal olor
— También quiso blanquear las aguas negras
Javier Trujillo
Acapulco, Gro. – Decenas de peces murieron, tras el vertimiento de más de mil litros de hipoclorito de sodio al canal pluvial del Morro, por trabajadores de Capama este martes en la zona del Acapulco Dorado.
El químico se vertió la madrugada de este martes, en la zona, y más tarde, el director del organismo Arturo Latabán López, acudió tras el reporte de que flotaban decenas de peces en la zona.
Trabajadores del organismo, aseguran que la dirección operativa a cargo de Alfredo Rivera Alarcón, ordenó el vertimiento del cloro para tratar de disminuir la contaminación por las aguas negras vertidas al canal pluvial de El Morro.
“Pensaba que era agua limpia, incluso la probé, y dije es agua dulce, cuando me voy enterando que es aguas nagras, tratadas con cloro y que puede haber una infección y que nosotros lo ignoramos.
“Es muy triste que las autoridades no hagan nada, ni pongan avisos que podamos pescar una infección. Ellos viven del turismo, pues deberían cuidar el mar”, reprochó Ángeles Mora, una turista proveniente del Estado de México.
Dijo que, al probar el agua, solamente supo salada, y reprochó que las autoridades oculten lo que sucede, cuando deberían alertar a los turistas de que hay zonas que no son aptas para los visitantes.
Más tarde, llegó una decena de trabajadores de Servicios Públicos y Capama, limpiaran el área donde flotaban los peces, levantaron la basura, y con arena formaron un dique para evitar que siguieran escurriendo las aguas residuales.
Así con bolsas de plástico, los trabajadores del municipio, sacaron de las aguas estancadas basura, maleza, y peces muertos.
En el lugar, se percibía un fuerte olor a cloro dejó como evidencia de las decenas de peces que flotaban muertos, y muchos salieron a la bahía de Acapulco, justo a un costado del hotel Emporio y la plaza Marbella.
José Luis Gómez, turistas de Querétaro, lamentó que siempre que ha venido a Acapulco, los canales pluviales arrojan aguas negras, pero ahora, les echan cloro para quitarle el mal olor.
“Que te puedo decir, ustedes que viven aquí, se dan cuenta que las autoridades no hacen nada. Huele feo, si, que los peces están muertos y se fueron al mar y a las autoridades eso no les importa”, dijo.