La unidad municipal de Protección Civil (PC) detectó una bóveda en el subsuelo de la “Plazuela de Bernal” que se ubica a unos 50 metros del zócalo de la ciudad y emitió un dictamen donde manifiesta el riesgo de un hundimiento, además de solicitar al área correspondiente realizar las acciones pertinentes para evitar el estacionamiento de vehículos que por su peso podrían generar un colapso.
Sin embargo, el residente del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Taxco, Francisco Javier García Santoveña, se apersonó con integrantes de ese organismo federal y el notario público número 2, Enrique del Rayo Castrejón, para elaborar una fe de hechos y colocar sellos de clausura a los trabajos preventivos ordenados por PC y con ello abonar al riesgo de hundimiento.
En el oficio PCTAX/0068/2017, el titular de esa dependencia, Saúl Zagal Morales, dio parte a la Junta de Conservación y Vigilancia de Taxco (JCyVT) de los trabajos de verificación, nivelación y reestructuración en la intersección de los callejones “Agua Escondida” y “Altos de Redondo” con la Plazuela de Bernal, donde detectaron una bóveda de aguas negras debajo del empedrado con una profundidad superior a un metro.
También, refiere que en el oficio 0150/2017 la dirección de desarrollo y planeación urbana determinó suspender temporalmente el estacionamiento de vehículos en esa área, hasta obtener una resolución libre y exenta de todo peligro emitida por un perito en la materia.
“Se determina no utilizar el área para estacionar vehículos automotores, esto como medida preventiva para eliminar el riesgo de un accidente que pudiera ser de lamentables consecuencias en caso de un colapso o asentamiento de la bóveda que se encuentra en la parte baja del empedrado”, reza el documento de PC.
En consecuencia se colocaron algunos pilotes de concreto de un metro de altura, para evitar el ingreso y estacionamiento de vehículos que pudieran provocar algún hundimiento, así como una plancha donde se pretende dibujar la “Flor de Cuetlaxóchitl” (noche buena) y convertir el área en un espacio peatonal para propios y visitantes.
Pero el representante del INAH, García Santoveña, entró en cólera y solicitó la presencia del fedatario público para suspender los trabajos preventivos solicitados por PC en la Plazuela de Bernal, con el argumento de que los trabajos modifican y alteran física y visualmente los niveles de una parte de esa zona.
Dijo que la zona corresponde al municipio, aunque aparentemente no se sabe quién autorizó la colocación de los pilotes y la plancha de concreto.
Aceptó que Protección Civil hizo una valoración de la zona donde se detectó la bóveda de aguas negras en el subsuelo de esa plazuela y por prudencia se determinó prohibir el estacionamiento de vehículos, pero pese a ello procedió a levantar una fe de hechos y suspender los trabajos preventivos sobre el lugar que podría hundirse.