En el Congreso descartan la posibilidad de que se cumplan las metas del Gobierno federal
El presidente de la Comisión de Desarrollo Rural del Congreso local, Héctor Ocampo Arcos señaló que hasta el momento, el gobierno de la República ha entregado apenas el 20 por ciento del fertilizante que debe distribuirse en toda la entidad, lo que mantiene en suspenso a los productores de granos básicos.
Ocampo Arcos, manifestó que el problema se ha complicado de manera importante, entre otras cosas porque los vales para recibir el insumo se distribuyen desde oficinas centrales, sin que se tenga claro el criterio que se utiliza para validarlos.
Advirtió que si hay productores que acrediten la posesión de parcelas, pero no están en la lista de vales, pues no van a poder recibir su insumo y quedarán fuera.
“Estamos como en una tómbola; el vale que salga pues que bueno, esa persona recibirá su fertilizante, pero el que no, así acredite su propiedad no recibirá el abono”, insistió.
Dijo que lo conveniente era que los vales se emitieran en las instancias inmediatas que se tienen en la entidad, cuidando que los controlaran funcionarios que conocen a los productores.
Sin embargo, al manejarse de manera centralista, el principal riesgo que se enfrenta es el de la exclusión.
Agregó que a la fecha, cuando el temporal de lluvias ya se instaló, en Guerrero se tienen 58 mil vales, de un total de 390 mil que se necesitan.
Precisó que la cantidad de vales que se tienen no representa más del 20 por ciento, de tal manera que no se cree posible alcanzar la meta de completar toda la distribución en un mes.
Explicó que en Guerrero se deben repartir alrededor de 140 mil toneladas, pero hasta el inicio de la semana habían llegado 35 mil, lo que incrementa el malestar de los campesinos.
El representante popular sostuvo que los responsables del programa de fertilizante en Guerrero mintieron en la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, pues señalaron que los puntos de distribución estaban totalmente abastecidos en tres regiones, lo que aseveró: “Esa es una mentira del tamaño del mundo, si hubiera ética en el gobierno federal ya les hubiera costado su puesto”.
Negó que los reclamos en torno al fertilizante tengan un manejo político, pues los productores tienen diferentes ideologías y todos cierran filas en torno al reclamo de que el insumo les llegue cuanto antes.