Durante cuatro horas, militares y policías ministeriales fueron retenidos en Quechultenango

– En adelante, las acciones de seguridad estarán acompañadas de la Preventiva Municipal y las guardias comunitarias, acuerdan en minuta

Jesús Dorantes

Chilpancingo , Gro .- Tras una retención de cuatro horas, habitantes de Quechultenango permitieron que elementos del Ejército Mexicano y de la Policía Investigadora Ministerial (PIM) abandonaran el Circuito Río Azul, tras la firma de una minuta de acuerdos en la que se comprometen a realizar las actividades de seguridad acompañados de la Preventiva Municipal y de las guardias comunitarias de la zona.

El acuerdo se logró hasta que a la cabecera municipal de Quechultenango se presentó el Comandante de la 35 Zona Militar, Enrique Martínez López; el titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), Evelio Méndez Gómez y el director de Gobernación, Francisco Rodríguez Cisneros.

Se instalaron dos mesas de diálogo con los pobladores, que de manera recurrente señalaron que su municipio es seguro, de tal suerte que la vigilancia que ofrecen las fuerzas federales y del estado hace más falta en otras partes de la entidad.

En el escrito se especifica que no se le impedirá el paso a los militares ni las corporaciones policíacas, siempre y cuando solo sean recorridos y que siempre sean acompañados de una patrulla de la policía municipal, además de las guardias comunitarias cuando acudan a los pueblos.

La condición es que el personal no permanezca varios días, tampoco que instalen campamentos en la zona.

El titular de la SSP solicitó que se permita el paso a las unidades de prevención del delito y de la Policía de Género, para ayudar en el combate a la violencia hacia las mujeres, lo que los lugareños de manera recurrente negaron que exista en la zona.

El comandante de la 35 Zona dijo que está preocupado por evitar que en Quechultenango sucedan hechos como los de Buena Vista de la Salud, la jornada del 26 de enero, donde hubo cuatro autodefensas asesinados.

“No ocasionemos situaciones que puedan confundir, que se enrienda que están agrediendo al personal, nosotros somos partes de ustedes”, dijo el jefe militar.

Para las 23:00 horas del miércoles, altos mandos, funcionarios, efectivos militares y de la FGE abandonaron la localidad, con dirección hacia la capital del Estado.

Las mujeres de la localidad devolvieron celulares y diferentes elementos que habían retenido al personal, siempre dijeron que todo estaba en orden.

Militares y policías reportaron una cámara dañada, además de que se perdió un teléfono celular, una computadora portátil y un estrobo.

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