– El enfrentamiento se prolongó por espacio de 40 minutos
Jesús Dorantes
Un enfrentamiento entre autodefensas de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) y supuestos integrantes del grupo delictivo conocido como “Los Ardillos” dejó un saldo inicial de cuatro muertos y un número todavía no determinado de heridos.
La tarde noche del miércoles 26 de enero, habitantes de la comunidad de Buena Vista de la Salud, municipio de Chilpancingo reporteron un enfrentamiento en la base de operaciones que la autodefensa de la UPOEG tiene en dicha localidad, sobre la carretera federal México-Acapulco.
El enfrentamiento se prolongó por espacio de 40 minutos y se extendió hacia el interior del pueblo, donde las familias solicitaron auxilio a través del número de emergencias 911 y colgaron algunos videos a través de las redes sociales.
La confrontación se registró poco después de las 18:00 horas y terminó antes de las 19:00.
Para las 20:00 horas, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) informó a través de sus plataformas digitales el trasladó hacia el punto de la confrontación de elementos de la Policía del Estado, personal de la Guardia Nacional (GN) y del Ejército Mexicano.
Bruno Placido Valerio, vocero de la UPOEG informó que todo comenzó a partir de la incursión de varias camionetas con integrantes del grupo delictivo de los ardillos.
“Ellos atacaron la base y los compañeros tuvieron que repeler”, aseguró Placido Valerio, quien confirmó a las 21:00 horas cuatro policías ciudadanos muertos y un número todavía no determinado de heridos.
A la base de la UPOEG llegó personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) para realizar las primeras diligencias, quienes ubicaron en el lugar a tres hombres heridos que fueron atendidos por paramédicos de Protección Civil.
En la carretera federal, cerca de la base atacada se localizaron dos camionetas reforzadas con blindaje artesanal, una Suburban y una Toyuta que fueron a travesadas sobre la cinta asfáltica.
En la zona del enfrentamiento se encontraron cientos de casquillos percutidos correspondiente a armas de uso exclusivo.
Tras el engrentamiento, los integrantes de la UPOEG cerraron la carretera federal México-Acapulco con tres camiones de carga, a los que les poncharon las llantas y atravesaro sobre la vialidad para impedir una nueva agresión.
El recuento de las afectaciones todavía está en proceso.