– Pide a los líderes de la Iglesia que no planteen “escenarios que no existen”
– Reitera negativa al dialogo con los grupos del crimen
Rogelio Agustín
“Nosotros no admitimos que se nos presenten escenarios que no existen”, dijo el secretario general de Gobierno, Saúl López Sollano al referirse al problema de la inseguridad, asunto que sostiene, se atiende con el apoyo de la administración federal.
En la capital del estado, el responsable de la política interna en la entidad, se refirió a las declaraciones hechas por dos líderes de la iglesia católica, quienes han señalado que el tema de la inseguridad parece escaparse del control de las autoridades de Guerrero.
En el inicio de la semana, el arzobispo de Acapulco, Leopoldo González González sostuvo que se necesita convocar a un dialogo por la paz en Guerrero, en el que se incluya a los grupos del crimen organizado que se disputan diferentes ciudades.
El lunes, el obispo de Chilpancingo, Salvador Rangel Mendoza reconoció que el problema de la incidencia delictiva es grave, por eso llamó a la sociedad a organizarse para tratar de contener los indicadores, que se dispararon en los últimos días.
Ante dichos comentarios, el responsable de la política interna destacó: “No, nosotros no admitimos que se nos presenten escenarios que no existen”.
Indicó: “Sí, tenemos problemas y hay que reconocerlo, pero siempre vamos a sostener que el dialogo es con la sociedad”.
López Sollano refirió que el Gobierno de Guerrero no puede colocarse en ningún momento fuera del marco que establece la ley.
Si se aceptaran las sugerencias de quienes plantean el acercamiento con los grupos delictivos, el funcionario indicó: “Al colocarnos en esa posición, nosotros no tendríamos autoridad política, moral ni legal para exigir el cumplimiento de la ley”.
Sostuvo que las autoridades que representan al Estado tienen muy claro cual es la ruta que se debe seguir, por lo que no habrán de eludir a su responsabilidad, tampoco a tener acercamientos con grupos o personas que se ubiquen fuera de la ley.
Dijo que se trabaja en la ruta de la coordinación con las corporaciones de los tres niveles de gobierno, lo que implica tener el respaldo del Gobierno de la República, que encabeza el presidente Andrés Manuel López Obrador.